Le sigo llamando “el pequeñajo” y cuándo me preguntan cuántos años tiene me doy cuenta que me estoy haciendo mayor ya que a estas alturas de la vida es todo un hombretón.
El primer recuerdo que tengo de él es cuando nació. Me llamaron por teléfono a casa prontito y me acuerdo que hacía muy buen día, buena fecha para presentarse en sociedad.
Jesús siempre ha sido un espíritu inquieto y ávido de nuevas experiencias como la de irse a Finlandia a pasar una temporada, la de viajar a mil y un lugares o ser el primero en independizarse. Ahora está empezando a recoger los frutos gracías en cierta forma a su formación en inglés por ejemplo, producto de esos viajes anteriormente mencionados.
Si tengo que destacar algo de él es que cuando tiene que tomarse algo en serio, lo cumple a rajatabla. Es bastante responsable y un maestro del orden, por lo menos a raiz de independizarse. En eso creo que ha salido a mí.
El 11 de Waikiki es muy amigo de sus amigos y siempre hará lo imposible si es un amigo el que necesita ayuda.
Por otro lado, en el fútbol siempre será mejor tenerlo en tu equipo que en el contrario ya que suele desestabilizar bastante los partidos por su clase y sus carrerones arriba y abajo.
Bueno hermano, que cada día te quiero más y que me siento muy orgulloso de ti. Sigue así.
MUCHÍSIMAS FELIZ y DOIDES JESUSTITUTO :)